CHANCE EAU FRAICHE

El Aceite para el cuerpo CHANCE EAU FRAÎCHE hidrata generosamente, dejando la piel y el cabello suaves y flexibles, y prolonga la estela floral y chispeante de CHANCE EAU FRAÎCHE. Elaborado con un 88% de ingredientes de origen natural*, su fórmula sedosa se absorbe al instante, dejando un tacto satinado y un velo de luz sobre la piel y el cabello. Disciplinado y nutrido, el cabello parece más brillante, flexible y sedoso.
El Aceite para el cuerpo CHANCE EAU FRAÎCHE se presenta en el emblemático frasco de cristal CHANCE, en un formato de 150 ml para completar su ritual de perfumado. Su formato en vaporizador facilita una aplicación generosa.

*Según la norma ISO 16128.

Infundido con las notas de la fragancia, el Aceite para el cuerpo revela toda la energía y vitalidad de la estela de CHANCE EAU FRAÎCHE. Una fragancia floral chispeante que combina el frescor picante de la cidra, la dulzura del jazmín y la presencia vibrante de la madera de teca.

"La suerte es mi alma". Durante toda su vida, Gabrielle Chanel cultivó su suerte. Creyendo que todo era posible, convirtió sus sueños en realidad.
CHANCE es la fragancia de los supersticiosos que, como Gabrielle Chanel, creen que la suerte favorece a quienes saben aprovecharla. Es una declaración de fe que anima a tomar las riendas de su destino.
Chispeante, sorprendente, desconcertante: en CHANEL, la suerte nunca ocurre por casualidad. Es el resultado de un encuentro oportuno, de una cita concertada de antemano.
Llega como un relámpago. Le embriaga y le envuelve en un torbellino. La suerte es un triunfo insolente y juvenil, como un guiño al destino. La suerte se agarra como un talismán con aroma de euforia.
Es el movimiento perpetuo y la renovación eterna, simbolizados por su frasco redondo que, como el infinito, no tiene fin. Es una forma de apostarlo todo por una misma, de elegirse, de darse la oportunidad de jugar una y otra vez.